Oscuro se torna el cielo,
En una noche de septiembre.
Por la luna abrigado
y por la niebla más fúnebre.
El silencio merodea ,
y las sombras reviven
Hoy los vivos mueren
y los muertos renacen...
De sus tumbas sigilosamente,
Con sus voces débiles y graves.
Ansiados llenan la noche...
¡su esquelético cuerpo retuercen!
Emiten vacíos ruidos ,
ahogándose en sus palabras.
Sintiendo asfixia,
al volver a sentir el aire y no la bruma
Cuerpos vacíos,
con almas perdidas,
buscan encontrarse
y volver a la vida.
Hoy la muerte sufre,
¡pues sus siervos se rebelan!
Y ella no entiende,
¿la paz no les brinda?